QUERIDOS PASAJEROS:
Pareciera casi una utopía, en medio de los conflictos
y tensiones político-sociales en las que vivimos inmersos, apelar a la
literatura como un sendero de unión. Intentar, a través de ella, un camino de
entendimiento y reconciliación. Sin embargo es posible … en mi humilde opinión.
Creo que los escritores somos “la voz de los que no tienen voz” y son las
letras las que nos permiten aportar nuestro granito de arena a la diaria
construcción del humanismo y la democracia. Modesto aporte, quizá, pero
valedero e imprescindible.
Y con esa idea en mente comenzamos nuestro tránsito en
este nuevo viaje.
La locomotora ya humeaba y el jefe de la estación hizo
sonar su campana. Y el trencito arrancó. Un casi imperceptible aroma a tequila
nos llamaba, por eso nos acercamos al aeropuerto y de allí partimos hacia
MÉXICO para recibir a nuestra primera pasajera, quien ya ha viajado con
nosotros: MARÍA EUGENIA HERNÁNDEZ
SALAIS. Nacida en Ensenada, Baja California, (México) reside en MAZATLAN,
SINALOA (MEXICO). Es Abogada con Maestrías en Derecho Penal, Administración
y una especialidad en Literatura Mexicana del Siglo XX. Asistente a congresos de lectura y poesía en: Puebla,
Oaxaca, Hermosillo (México), La
Habana (Cuba), Encuentros de poetas en Argentina: San Juan,
Buenos Aires, Santa Maria de Punilla, y Brinkmann. Asimismo en Malasia y Perú. Publicaciones:
en 2009 libro de poemas “Brumas y lejanías”
(Ed. De los cuatro vientos – Bs. As.);
en 2010 libro de poemas “Fuegos fatuos” (Ed. De los cuatro vientos – Bs. As.); en
2011 libro de relatos “Sirenas amarillas”
(Ed. De los cuatro vientos – Bs. As.); en 2014 breve antología bilingüe “Océanica” (Ed. De los cuatros vientos –
Bs. As.). Nos deja hoy sus poemas de interesante temática.
E Mail: mehs1217@prodigy.net.mx
LOS CUATRO ELEMENTOS
(DIALOGOS)
AGUA
Hoy quiero entablar un
dialogo contigo, agua;
tus mudanzas alucinan mis
sentidos,
estoy dispuesta a
perturbarte hasta que cedas, agua;
irrumpir en pecado
mineral, tu helado manto.
Intoxicada en tus
burbujas juguetonas, agua;
decoraré mi cuerpo
transparente
con diminutas perlas tornasoles, y navegar, vela sin
viento,
muda sirena de hojalata y
caracolas.
Necesito que me cuentes,
agua;
¿cómo puedes mudar del
inmenso glaciar petrificado?
a diminuta gota de
tozudez inevitable
que un día perfora el
lomo imbatible de la roca.
¿ Qué camaleónico poder
te fue heredado? agua;
por unos Dioses
caprichosos, a cual más de exclusivistas;
que te permiten adoptar
todas las formas o
huir liviana al vano
intento de encerrarte a toda prisa.
¿ De donde obtienes esa
serena mansedumbre? agua;
que te permite alternar
risas con llantos,
pues igual lavas tibio y tembloroso cuerpo infante,
que el gélido despojo de
los muertos.
¡Anda, se buena y transmite
generosa, agua!,
secretos de vida y de
misterio vueltos lluvia;
tocadas por tu mano
generosa,
fachadas grises,
mortecinas, cobran vida.
FUEGO
Sorprende
encontrarte tan sereno, no pareces ser tú,
devastador
y tan temido amigo fuego. En candelero,
mástil de
cera, emites suave luz, apenas tibia.
Tímida
comulgante pareciera, o aquella recóndita
armonía,
diáfana virtud que cede cuando imita,
la
expresión de un niño cuando duerme.
Te
suplico que me escuches fuego, detén por un
instante,
el voraz arrebato de tus llamas;
pues así
como admiro tu poder, igual le temo.
Tus
insaciables lenguas, vestidas de sino fatal,
se
obstinan en destruir cuanto ellas tocan.
arden los
bosques, los hogares, los cuerpos.
Vencida
adversidad de las tinieblas,
el
enemigo huyó, disfrazó su rabia y el fracaso
con las
aterradoras sombras de la noche.
Enamora
el pensamiento amigo fuego, imaginar
aquel
corito nocturno. Homo Erectus confortados
al calor
y la luz de un mundo que se ignora.
Perpleja
sinrazón, salobre desbordó
brillo en
pupilas virginales. Bautismo primigenio
inauguraba,
el infinito océano de los llantos.
Fue ese
mágico no tiempo amigo fuego,
casi lo
aseguro, génesis
de tu
existencia entre nosotros.
Pero ni
ellos, ni tu adivinaron, que ahí,
sin
proponérselo o buscarlo de algún modo,
alumbraste también la narrativa.
AIRE
Eres, un
caprichoso deambular en
ocasiones,
el giro evanescente de una
pluma,
astuta levedad en la que ocultas, aire;
la fuerza poderosa de tus alas.
Envuelve mi figura, huye conmigo aire;
eleva en
hojarasca este cuerpo desgastado
por el
tiempo, añoro ligereza del pasado.
Pintados
de añil, viajemos entre nubes;
elevaré
para ti en dulce sonido, antífona
de fe,
plegaria dolorida en peregrino.
Éste
agradece cuando le rodeas aire, alivias
su
jornada cuesta arriba. Exánimes a tu caricia,
parecen
suavizarse rocas y laderas del camino.
O si lo
prefieres aire, huyamos suspendidos en la
relinga
de una vela.
Vuelve mi
nave, majestuoso corcel alucinado.
Quiero
ser jinete alado, volar y sentir entre
las
piernas, en loco palpitar miles de olas.
Pasado el
huracán, acomete las velas del navío, aire,
borda en
su regazo la aventura; surquemos el mar,
en busca
de irredenta poesía.
TIERRA
Inclinada
sobre un surco te profano,
hundo mis
manos por completo, hasta sentir,
correr la savia vegetal por mis veneros,
así, sólo
así te siento, madre tierra.
Tu
vientre generoso hasta el absurdo,
intenta remediar nuestras miserias;
alumbras
dones, que nunca son bastantes,
ni
solucionan la locura que hoy impera.
Tu
generosidad que inagotable pareciera
soberbios
teorizamos infinita, más bien sabemos
que esa
paciencia luminosa, se apagará cualquier día
sin
remedio. Vives, y sin embargo te nos mueres.
Por
supuesto nos tomamos unos tequilas, cantamos unos corridos y nos despedimos
prometiendo regresar. Ya en el país, la locomotora se allegó hasta una
localidad del Gran Buenos Aires para que ascendiera un nuevo pasajero: OSVALDO HUESO. Nacido en Liniers
vive en MORÓN (Prov. de Bs. As.). Trabajó en la empresa Guereño S.A (artículos de limpieza y
tocador), luego fue martillero por 20 años en Castelar. Representó a la Argentina en Atletismo.
Al jubilarse se dedicó a escribir cuentos, a pintar y hacer alguna
escultura. Comenzó a escribir y entre regulares, malos y peores, escribió 95
cuentos. Actualmente integra el Consejo de
Adultos Mayores en la municipalidad de Morón. Entre los premios
que ha recibido (se ve que tan malo no es el hombre escribiendo) se cuentan:
Mención “El Desierto” (narrativa), S.A.D.E. San Fernando, Pcia. Bs. As.; 2do.
Premio (narrativa), en Berisso, Pcia. Bs. As.; 3er. Premio (narrativa) en
Editorial “Raíz Alternativa” Quilmes - Pcia. Bs. As.; Mención de honor (Poesía)
en “CATHEDRA” Capital Federal, Concurso Nacional “Sol de Invierno”; 2do. Premio
(narrativa) Remedios de Escalada, Pcia. Bs. As., Certamen Raúl González Tuñon;
ler. Premio en revista literaria “Noticias de la Musa ” –Morón- Pcia. Bs. As.;
lra. Mención en Certamen Literario Nacional “Atilio S. Giraudo”
-Arrecifes-Pcia. Bs. As..... y algunos más. Está por publicar su primer libro
de cuentos. Nos trae, precisamente, un cuento muy interesante.
EL OPTICULARIO
Bazán comenzó la búsqueda otra vez, hacía tiempo que
esa cosa metida en su cabeza lo impulsaba. Por momentos se había sentido
impotente, que no tenía sentido, que era su
imaginación impregnada por su profesión; pero siempre decidía continuar.
Ese algo que lo presionaba y no podía definir.
Llegó al lugar, pero no le pareció ese el lugar, a
veces se le antojaban iguales o parecidos; estaban en su mente como un dibujo
confuso. Siguió caminando, de todas maneras tenía tiempo, todo el tiempo que
quisiera. Lo que el sabía, o sentía, como un torbellino de neuronas en su
cerebro que había sucedido tal vez en un pasado muy anterior, lo seguía
atormentando. Noches de insomnio, de dar vueltas en su cama, en un país tan
extraño. Ese insólito nombre Opticulario,
estaba en su mente desde tiempos remotos, en ese tiempo no definido en su
subconsciente.
Caminó un poco más. De pronto un estremecimiento, y
sintió que ese, era el lugar que aparecía en sus sueños, cambiado seguramente
por el transcurso de tantos años. De cualquier manera el desierto de arena que
aparecía en sus sueños ahora modificado por un imponente edificio, guardaba
algo que él sentía que podía encontrar y esperaba la señal que lo guiaría como
lo había hecho hasta ahora.
Recorrió el edificio, el ascensor lo precipitó los
cuatrocientos ochenta pisos hasta el mirador. Retrocedió de inmediato, el
inmenso vacío parecía atraerlo. Decidió esperar el anochecer, sentía que ese
era el momento si alguna revelación aparecía.
¡Repentinamente un impulso lo volvió al ascensor! Marcó el último subsuelo y penetró en un
amplio recinto. Enormes placas de cemento formando baldosones romboides estaban
bajo su vista. Sin saber como, se detuvo en el baldosón del centro; y un estremecimiento
recorrió su cuerpo. Percibió que esa, era la señal esperada por tantos años,
buscando el opticulario sin saber que significaba ese nombre que solo aparecía
en sus sueños.
Ahora estaba ahí bajo sus pies y bajo ese impenetrable
bloque de cemento romboide. El Opticulario
era el recinto, ahora lo sabía y alguien estaba ahí. No percibía ninguna
señal y se sintió desanimado. De pronto se dio cuenta, debía volver a soñar,
quizás así se le revelara algo mas.
Pidió una habitación, sus ganancias como arqueólogo le
permitían darse algún lujo extremo de vez en cuando. La habitación tenía todas
las suntuosidades soñadas, pero a él sólo le importaba dormir. Bajó al inmenso
y lujoso comedor, no se detuvo en las exquisiteces que se ofrecían. Pidió una
comida típica y la acompañó con un buen vino. Luego se dirigió a su habitación.
El vino estaba cumpliendo su objetivo, un sopor creciente comenzaba a
invadirlo, vio figuras confusas a su alrededor y se tiró en la cama vestido
como estaba. Al día siguiente se levantó, tomó el ascensor y bajó al último subsuelo.
Quería comprobar si el extraño sueño se completaba con la realidad. Se paró en
el baldosón romboide y esperó. Le pareció que el suelo se aflojaba bajo sus
pies. Sintió miedo pero una extraña valentía lo ayudaba a no desesperar. Su
cuerpo iba atravesando el baldosón. Ya medio cuerpo estaba sumergido, no sentía
ninguna opresión a pesar que atravesaba el duro cemento. Pensó que pasaría
cuando todo su cuerpo se sumergiera, si iba a poder respirar, pensaba en el
sueño y el sueño se estaba cumpliendo. Ya sus pies tocaban la arena y se dio
cuenta que el antiguo desierto lo estaba absorbiendo. Iba a llegar al Opticulario y a ella. Llegó a las ruinas
de lo que parecía un recinto tapado en parte por la arena. A medida que con
dificultad se acercaba al centro, alcanzó a distinguir una figura acostada
sobre una piedra blanca y otra tratando de detener a quien clavaba un puñal en
el pecho de la mujer. Aterrorizado se dio cuenta que esa figura era él y vio,
en los ojos de la mujer, el gesto de dolor y de desazón por no haber llegado a
tiempo a detener el brazo que empuñaba el puñal. Trató de correr hacia ella
pero las ruinas se desmoronaban y la arena comenzaba a cubrirlo, en un último
esfuerzo llegó a la piedra y al tocar a la mujer, vio como se deshacía entre sus dedos, y la arena seguía cubriéndolo…
El trencito dijo adiós y la locomotora humeó mientras
ponía rumbo a su nuevo destino, en el Litoral. Que allí nos esperaba un nuevo
pasajero: ROGELIO LANESE. Reside en
la ciudad de ROSARIO (prov. de SANTA
FE). Es Ingeniero Agrónomo y lo dejo que se presente: “Como
me interesa sobremanera el tema del arte del vino, ya que el buen vino no es
para saciar la sed, sino que es para permitirse admirar la naturaleza en todo
su esplendor a través de una copa. Esto me lleva a la comercialización de
vinos, y a su vez me dedico a hacer dulces artesanales sin ningún tipo de
conservantes. En cuanto a la parte Literaria, me gusta escribir poesía sobre
los varietales y algunos cuentos. Paticipé de una antología en el 2012 donde
fueron seleccionados 9 poemas de los 9 enviados, pero solamente publique dos de
ellos, ya que supuse que eran los de mejor calidad. Este material fue editado
por Editorial de los Cuatro Vientos, y a través esta editorial estoy
participando del Certamen del año 2015” Aquí
nos deja unos poemas referidos, precisamente, al vino y un relato breve. Espero
lo disfruten.
E Mail: 0905lria@gmail.com
Cabernet-Sauvignon
Savia francesa en sus vasos
conductores,
derrama fortaleza, estilo.
Sello personal tonalidades oscuras,
lágrimas pesadas.
Excelencia, deleite,
paladar exigente.
armónicos taninos.
Aromas pimentados,
sutileza con roble.
Bienvenido,
noble aristocrático,
Cabernet Sauvignon.
Chardonnay
Ecléctico perfil,
espejo de lágrimas,
maíz florecido en
miel y canela.
Excitación,
volcán sensorial
su lava frutal,
planea en aromas,
macera el alma
nació
Chardonnay
Malbec
Equilibrio, varietal homogéneo,
expresión , rojo rubí intenso,
fluida armonía.
Calidad,
lágrimas aladas.
Terroir, manifestación genuina,
amplitud térmica adecuada,
desarrolla cuerpo sublime,
frutado, distinguido.
Luján de Cuyo,
tu lugar en el mundo.
Estirpe de vinos, Malbec Argentino.
Merlot
Gotas acarameladas,
brillo, terciopelo,
plumaje azul negruzco,
bayas esbeltas,
torso desnudo,
con taninos suaves, redondos.
Lágrimas suspendidas,
sinestesia mágica,
Merlot varietal ensueño,
placer ,fantasía del alma
Cuatro
Virtudes cardinales.
Justicia,
Fortaleza, Templanza y Prudencia
Una pareja de personas mayores( no especifiquemos lo de
mayores), acuden a una cena de la Cooperadora del Colegio primario donde cursa su
nieto menor el primer grado.
En el transcurso de la cena se sortea un plasma de 56 pulgadas .
Resulta que tienen la suerte de que el número de la
abuela es el ganador de este sorteo.
Los tres nietos estaban muy contentos porque suponían
que este plasma podría ser destinado en casa de los abuelos para que se
entretengan con los video juegos
Ya estaban disputando el uso del plasma, antes
que finalice la cena.
El abuelo ante esta situación fue explícito:
- Esto lo resolvemos el sábado en mi casa.
Si bien tanto el abuelo, como la abuela están
dispuestos a darles todos lo gustos a los nietos dentro de sus posibilidades,
no permiten que decidan por ellos.
Sábado por la tarde -torta de manzanas de la abuela de
la cual seguramente no quedará nada-
los cinco están reunidos en la cocina.
Los nietos uno de 12, una nena de 9, y el varón más
pequeño de 6 años.
- Hemos hablado con la abuela y le vamos a proponer
algo, para el uso del plasma.
Los chicos están muy atentos, el abuelo generalmente no
es de hablar demasiado.
1- El plasma va al living.
2- Lo vamos a disfrutar todos
3- Nosotros les regalamos la Play Station de
última generación.
Se escuchó al unísono: ¡¡Que bueno abuelo, sos un
genio!!
- si, pero hay condiciones
- ¿ Cuáles?, pregunta el nieto mayor
- Todos sabemos leer, incluido Maxi que es el más
chiquito. Entonces cada uno va a elegir un libro que tengan, o que lean por
Internet, y por mail me van a mandar que entendieron de lo que estuvieron
leyendo.
- Abuelo no tenemos tiempo, la nieta de 9 años.
- Si no tienen tiempo para leer, tampoco lo tienen
disponible para jugar video juegos
El nieto más grande, ya estaba pensando en copiar y
pegar el resumen del libro que también figura en Internet.
- Abuelo, leer es un poco aburrido, el nieto más chico
- Eso es de acuerdo al libro que elijas, hoy hay muchos
libros que son divertidos.
- ¿ Hay que mandarte mail todos los días? , pregunta el
nieto mayor
- No es necesario, sólo cuando terminen un capítulo, y
ojo que yo me voy a dar cuenta, si copiaron el resumen de Internet, ó si lo
escribieron ustedes
¿ Y si uno de nosotros lee mucho , pero no entiende?,
dice la nena
- No se preocupen yo les voy a enseñar a interpretar
- Y si uno lee más que otro , cuál es el premio? ,
pregunta el mayor
- Mirá, todos van a tener la misma cantidad de horas
por día destinadas a jugar, pero aquel, que avance más rápido, podrá venir más
rápido a usar la play.
- ¿ y hasta cuándo vamos a leer? pregunta el más
pequeño
- No hay un límite de días, la play es solamente un
juego que en algún momento no será una diversión distinta, mientras que los
libros son tantos, que cuando los entiendan, les va a gustar seguir leyendo, y
ya no van a necesitar que el abuelo los vaya guiando, ni en la lectura, ni en
la play.
Se puede visualizar la presencia de la Justicia , porque todos
van a tener acceso al nuevo plasma, con ciertas condiciones, la Fortaleza de asumir el
rol de establecer determinadas reglas aún con los nietos, templanza para
dedicarse a controlar y enseñar a su descendencia , y prudencia de incorporar
un buen hábito, acorde al entorno en que se desenvuelven los chicos.
Dimos la consabida vuelta por el magnífico
Monumento a la Bandera
y el trencito decidió cambiar los aires del río Paraná por los de las sierras
cordobesas. Pues allí aguardaba un amigo: ALFREDO
LEMON. Nacido
en CÓRDOBA (1960)
ciudad donde reside. Abogado. Como Profesor de Filosofía ejerció en la Facultad de Derecho y
Ciencias Sociales de la
Universidad de Córdoba y fue miembro del Ateneo Filosófico de
Nueva Córdoba. Continuó en la docencia en la cátedra de Derecho Constitucional
en la Universidad
Blas Pascal; en la cátedra de Historia de la Cultura en la Universidad Católica
de Córdoba y en la cátedra de Teoría de la Comunicación en la Facultad de Ciencias
Políticas y Relaciones Internacionales. Obra poética: Cuerpo
amanecido, 1988. Humanidad hecha de palabras, 1993. Sobre el cristal del papel
2004. Libro de ensayos: El mono metafísico, 1991. Premios
más importantes: “Romilio Rivero, Municipalidad de Córdoba”. 1985. “Plaza
de los poetas, José Pedroni”. 1992. “Escritores por la paz”, Sociedad
Científica Argentina.1994. “Premio Jóvenes Sobresalientes” de la Bolsa de Comercio de Cba.
1994. “Asociación de Escritores Argentinos”. 1995. Sociedad Argentina de
Letras, Artes y Ciencias”. 1995. “Premio Jóvenes por la paz” en 1995.
Reconocimiento “Obrero de la cultura” San Marcos, 2002. Tercer Premio Sociedad
de Escritores de Río Cuarto 2005. Mención de Honor de la Sociedad Argentina
de Escritores Villa María, Premio “Primo Belletti”, 2007. Colabora en varios
medios literarios del país. Miembro asistente al Seminario de autores de
Córdoba en la
Universidad Nacional de Córdoba, 2005, 2007. Algunos de sus
poemas han sido traducidos al inglés, italiano, catalán y francés. Es miembro
del Foro Internacional de Literatura y Cultura por la paz. Nos entrega sus
poemas para el disfrute.
E Mail: alfredo_lemon@yahoo.com.ar
EL CHAKRA DEL CORAZÓN
Todo es efímero sino es purificado:
diligencia, piedad, desprendimiento.
Nacer o morir son eventos naturales,
simplemente suceden.
No pidas larga vida sino vida vivida.
No pidas larga vida sino vida divina.
Ese capullo de loto en el centro tu pecho
cobija el prodigio:
es un jardín donde juegan los duendes,
late la sangre y el abismo.
Un ángel melancólico consuela a quien sufre de amor.
Sólo existe una mujer en el mundo
pero no está contigo.
AUSENCIA
Pocas cosas dejaste:
un café humeante en la cocina
y tu perfume de hembra todavía.
Pero las sábanas guardarán para siempre
todo el amor de los delfines.
LOS INMORTALES GUÍAN EL CAMINO
Los dioses hablan en sueños a los hombres.
Asciende hasta el centro secreto de la vida.
Siente la fuerza del tigre y el fuego del dragón,
la mansedumbre del cordero antes de morir.
Lleva tus ojos hacia una estrella distante:
Borges, Einstein, Madre Teresa.
Advierte el sufrimiento y la ignorancia.
Caza tus zorros con lanzas de oro.
La gracia no demanda más.
ANTE
Cuando agoniza un hombre,
agoniza Occidente.
Cada lágrima enseña una verdad.
Cada deseo demanda demasiado.
No eres un cuerpo
-frágil y débil ante el fin-
sino una conciencia sedienta de Absoluto
erguida inmortal.
Cómo proclamar la paz,
si el odio infectó los tronos de la tierra.
Cómo
predicar humildad,
si el poder
nos esclaviza. Tú, escritor, darías la vida por la palabra?
Te esforzarás por el poema?
NIEVE EN “LA
CUMBRECITA ”
Copos plateados caen oblicuos
contra el ventanal de la cabaña.
Lágrimas blancas sobre los cipreses.
Entre mi espíritu y la noche,
solo la luna,
solo la luna,
esclava y lasciva.
La maquinista se reconfortó con unos criollitos
mientras degustaba unos mates perfumaditos con peperina. Dijimos adiós a las
sierras y al tranquito corto nos fuimos para nuestro andén. Y aquí los espero
con sus poemas y sus cuentos … y su minibiografía. El punto de llegada es: letrasenelanden@gmail.com
Les recuerdo que todos los números anteriores
pueden ser consultados en la página web. ¡Y nos fuimos! Será hasta el próximo
encuentro …
CRIS FERNÁNDEZ
Muchas gracias querida CRIS por la publicación de poemas de mi autoría. Gracias por tu generosa tarea de conductora de este tren que nos permite gozar de la belleza de la poesía y la celebración de la palabra. Es un gusto participar y compartir con otros autores. Bendición para tus días y tu obra. Abrazo afectuoso. Alfredo
ResponderEliminar