Número 165

PASAJEROS AL TREN !!!!!!

Vivimos en tiempos complicados: guerras y conflictos civiles, desastres climáticos con los que la Madre Naturaleza demuestra su poder, enfermedades y pandemias varias … Realmente parece difícil mantener la alegría y la esperanza de alcanzar un mundo mejor. Sin embargo, yo creo que aferrarnos y disfrutar de los pequeños momentos de cada día, del amor, del afecto, de la belleza que pasa ante nuestros ojos es una buena manera de conservar la calidez del corazón. Y el brillo de la mirada y las ganas de vivir. ¿Suena a utopía? Quizás … Pero el esfuerzo vale la pena.

 

Y sin más preámbulos comenzamos nuestro viaje. Como la caridad bien entendida comienza por casa, esta maquinista se sube al trencito. Pues acabo de ser premiada en el certamen literario “Por la memoria de los pueblos” que organiza la municipalidad de General Pico, L.P. Aquí les dejo los poemas que obtuvieron el 1º y 2º premio.

 

CALDÉN …              (1er. premio)

 

Erguido en la llanura,

centinela del tiempo y del pasado

abre sus ramas rugosas,

centenarias,

en un abrazo vital.

 

… Y el viento canta

su tonada de polvo

y de sequías,

o de lluvia bendita

y bienhechora.

 

Sus ojos de madera

han contemplado

relinchos y malones;

y el sonido mortal

de los fusiles …

de galopes audaces

y de guerra.

 

Erguido en la llanura

centinela de sueños

y visiones.

 

     … Un caldén de la pampa …

 

 

DOÑA LUISA       (2do. premio)

 

Lenta cae la tarde.

Las chivas

son un manchón borroso

en la reseca barda.

Doña Luisa las mira

-sin ver-

mientras el sol se esconde.

Sueña –quizás-

con verdes pastos,

un arroyo cantor,

tal vez caldenes.

Pero el paisaje

impiadoso en su belleza

nada trae de nuevo.

Doña Luisa suspira

y va arreando sus chivas.

La soledad le crece

entre las manos

rugosas y marchitas.

 

Y en silencio la noche

la acompaña …

                           

Ahora continuamos el viaje y cruzaremos a la otra orilla del río para recibir a un entrañable amigo: GERARDO MOLINA. Poeta, Escritor y Docente. Nació en LOS CERRILLOS, departamento CANELONES, URUGUAY el 19 de octubre de 1938. Estudió en la Facultad de Derecho y en el Instituto Magisterial Superior de Montevideo. Profesor de Idioma Español y Ex Director de los Liceos de Las Piedras N°2 y de Santa Lucía. Ha dictado conferencias y ofrecido recitales de su poesía en Uruguay, Argentina, Chile, Perú, Brasil, España, Francia e Italia. Algunos Premios: Flor de Oro en los Juegos Florales Hispanoamericanos (1973). Primer Premio Poesía, Gobierno de Mendoza, Argentina (1990). Faja de Plata Internacional a la mejor producción latinoamericana de 1995 en Lima, Perú, por su obra “El Latido de la Copla”. Primer Premio Poesía, Medalla de Oro en Pergamino, Provincia de Buenos Aires, Argentina (1999). Primer Premio del Concurso de Poesía «Rocco Certo 2000”, Tonnarella, Messina, Italia. Premio a la Excelencia, Revista de los Poetas, Córdoba (2002). Primer Premio Poesía, Revista “Alas del Alma”, Buenos Aires (2009 y 2010). Distinguido como Caballero de la Poesía Latinoamericana en Rosario de Santa Fe (2003). Homenajeado por el Parlamento Nacional Uruguayo (1987 y 2006) y en la Capital de la Poesía, Traslasierra, Córdoba (2004). Su obra “Ceibos y Copihues”, compartida con la escritora chilena Elisa Ferrada, fue aprobada por la CODECUC (Corporación de Educación) para la enseñanza en la Comuna de Maipú, Chile. Otras obras aprobadas para la Educación Primaria, Secundaria e Institutos de Formación Docente en su país: “Panaliflor” y “La Versificación Española”.  Medalla de Oro del Liceo Nacional, Maipú, Chile “por su gran aporte a la Educación y a la Cultura de nuestro país”, 2015. Medalla de Oro “por su legado al arte, la cultura y las letras”, Maipú, Chile, 2016.  Estrella del Sur Oro, 2017 y Platino, 2018, Montevideo. Premio Carlos Gardel, 2018.

E Mail:  gerardomolinacastrillo@gmail.com

POR EL CAMINO REAL...

 

Por el Camino Real iba mi padre

-silbo en los labios, luz en la mirada-

prestancia campesina, gentilhombre

en otro tiempo de pasión y hazañas.

 

¡Y era linda mi madre! Como un sueño

de esos que al despertar pueblan el alma

de infinitos celajes de ternura

como una intensa y única alborada.

 

Iba mi padre, silbo entre los labios,

por la tarde que crece -azul y gualda-

de perfumes intensos. El labriego

va redondeando el seno de las parvas.

 

En azules regiones de misterio

aún vagaba mi alma

para alumbrar, al fin, cuando el lucero

recompone la música del alba.

 

Y allí cerca nací, con un destino:

noviado del amor y la palabra,

romero impenitente

y pródigo en la vida y en las aulas.

 

Con un rezo en los labios se ha dormido

mi madre. Y, dulce novia, su mañana

teje en un sueño de jazmín y estrella

y de un sencillo hogar junto a la chacra.

 

Por el Camino Real vuelve mi padre

y en su silbo acrecido de esperanzas

el alma, toda miel, aflora y ríe.

Un silencio de estrellas le acompaña.

 

 

EL RANCHO

 

Como manos que se unen para el rezo

su techo primitivo presupone

un corazón cristiano donde pone

el campesino albor su primer beso.

 

Parte entonces la grey y queda opreso

de un fervor casi humano que traspone

su cuerpo de terrón con que dispone

la ternura del pan a su regreso

 

Llega la hora nocturnal, serena,

un aroma frutal llama a la cena

mientras reasume su actitud de rezo.

 

Una gran flor protege su contorno

y en seráfica paz ensaya el horno

tras de la fronda, su postrer bostezo.

 

                              

HUELLAS

Estas tierras trabajó

Mi padre, joven y fuerte,

Antes de irse con Dios…

Tal vez sus huellas encuentre.

 

Su silbo, quizá su canto

Esté en los atardeceres…

Ando y ando sus caminos

Tal vez sus huellas encuentre.

 

A los caminos que anduvo

Mi padre, suelo volver,

Y, así, andando, me parece

Que camino junto a él.

 

 

LLUVIA

 

Cabe un hilito de lluvia

En la cometa del alba

Volví –gurí aventurero-

A regustar la fragancia

De un breve patio de tierra

donde discurría el agua,

Una mañana de lluvia,

Abierta al misterio, mi alma.

 

Traveseaban los gorriones

En la gramilla imantada

De tornátil pedrería.

Olor de tierra mojada,

Y de la menta, el hinojo

Y los espinillos gualdas.

 

La ternura silenciosa

De mi madre era en “las casas”

Todo el sol, aunque la lluvia

Con sus densos pentagramas

Volcara imprecisos cantos

En los surcos de la chacra.

 

Cabe un hilito de lluvia

¡qué regusto de mi infancia!

 

 

UN DÍA...

 

El azul pentagrama de la lluvia,

tu recuerdo tenaz como una herida

que no termina de cerrar.

                                           Un día,

un sol recién lavado

alumbrará de nuevo en tu ventana

y estarás esperándome

para ponerle claves de armonía

al azul pentagrama de la lluvia.

 

 

CASI  PRIMAVERA

 

Una banda de músicos bohemios

-roto el vaho de la mañana nueva-

su bullicio trajeron a mi patio

donde humildes gorriones señorean.

 

Al festejo se suman los dorados

          -tan mimosa pareja-

y el sabiá y el hornero presurosos

ocupan su lugar en la platea.

 

Un blando premio fulge en la gramilla

          de migas como estrellas.

Desde la tensa cuerda de la ropa

el glotón benteveo curiosea.

 

Una banda de músicos bohemios

que el verde visten de armonías frescas

y una tímida flor de duraznero...

          ¡setiembre ya está cerca!

 

de su libro “ODA AL ÁRBOL y otros poemas”

 

Unos ricos matecitos para entibiar el día y regresamos a nuestro país para recibir a otra amiga: MARI  BETTI  PEREYRA DE FACCHINI.  Nació en Canals y reside en LA CARLOTA Pcia. de CÓRDOBA) Poeta, narradora  y Profesora en Letras. Fue Directora Municipal de Cultura  y Delegada Cultural de Córdoba por su región. Socia de SADE Córdoba Capital y Presidente fundadora de Filial La Carlota Presidente de Filial América Madre (AMA ) y corresponsal de la Academia de Literatura infantojuvenil (ALIJ ). Coordina Talleres, Cafés literarios y lectura animada en escuelas, Bibliotecas y plazas. Sus obras: ”Soltar Amarras”, “Cuentiversos para niños que sueñan”,”Cuento en Taza”,”Coplas para vida” y ”100 para el bolsillo”. En coautoría con Mariano Córdoba: “Seguilo vos” (cuentos) . Editó tres libros compartidos: “La Carlota Lírica”,”Huellas del Interior” y “Cuenco de Letras”. Textos suyos integran 68 Antologías de distintas provincias. Participa en Congresos y Encuentros de Escritores nacionales y de países vecinos.

E Mail: floresdetilo@hotmail.com

 

 

                         LA  PELÍCULA

 

Hace dos días que explora la zona.

Atento a su destino, disminuye la marcha ante cada cartel indicador. Al fin ve al que busca:”Camino Real” y la flecha hacia la izquierda. Sobre el anuncio de la noche encuentra una posada. Con  un vino patero acompaña al churrasco que le traen del fogón del patio.

La historia se repite por varios días.

Hace mucho que no halla carteles, aunque sabe que está en el antiguo camino.

Debería detenerse a sacar alguna foto, pero va cansado. Ya no puede calcular las lunas que han pasado, ni las leguas cruzadas.

Por fin llega a “La soñadita”, la estancia que le han dicho que sería la ideal para el escenario de su próximo film. Al cruzar la tranquera piensa que una toma desde ahí estaría buena.

Se baja. Antes de llamar, descorre la puerta de la Fiat Toro para bajar la cámara y el trípode, pero sólo encuentra tres fardos de cuero de guanaco y un baúl con buches de avestruz sobados para talegos, que de seguro han pedido para mandar a  Bs.As. Contra la tapa, en un pedazo de cuero crudo  escrito con carbonilla , reza: “Las plumas van por carreta, en la siguiente luna”.

El asombro lo ha pasmado y permanece inmóvil unos segundos. Después, entre temeroso y desorientado, avanza hacia uno de los  espejos del vehículo.

En su lugar, se topa con un pedazo de leño descascarado del cual pende un farol.

Desesperado, corre a mirarse en las aguas de la laguna junto a la cual ha estacionado. Se desconoce. La barba le tapa el cuello y lleva sombrero ovejuno.

No encuentra su celular, pero el jean y la remera de los Rolling Stone están intactos.    

 

 

                               BUROCRACIA…?

 

La Sra. Raquelita se acercó rengueando al box Nº 2, por tercera vez en la semana. Siempre le faltaba algo para que le dieran el turno para la resonancia magnética.

-Número de turno, Carnet de jubilado, fotocopia del documento de identidad –actualizado-y último recibo de sueldo.

-Aquí está todo.

-Orden de derivación , original y fotocopia .Pedido del especialista.

-Sírvase.

La muchacha los revisó  y con un ademán displicente empujó todo  hacia la anciana diciendo:

-Deberá traerme otra copia del documento; ésta está muy oscura.

-Tengo el original, si quiere constatar los datos, auque se leen bien…

-No me sirve, Sra. Vuelva con todo en orden.-Y alzando la voz, al tiempo que extendía la mano hacia el teléfono que no dejaba de sonar, agregó:--¡¡El que sigue!!

Raquel intentó ponerse de pie, pero el dolor la paralizó y volvió a sentarse. Trató de tranquilizarse mientras la chica hablaba. Al querer recoger los papeles vio la mano de la empleada sobre ellos.

-Su numerito, por favor.

-Quedó ahí, señorita.

-Carnet de jubilado, fotocopia del documento de identidad y último recibo de sueldo.

-Aquí están, con las ordenes del médico de cabecera y del traumatólogo.

La joven los revisó sonriente. (La otra mano  permanecía apoyada en el celular).

-Todo bien, Sra. Aquí tiene su turno. Y alzando otra vez la voz: ¡¡El que sigue!!

Raquel tomó la autorización y con la cartera a medio colgar salió rengueando pero rápido.

Fue la primera y la última vez que le resultó oportuno el intenso dolor sobre su rodilla derecha.

  

La locomotora andaba con ganas de cambiar de aires. Por eso mientras la maquinista degustaba unos sabrosos criollitos enfiló hacia el aeropuerto. Y de allí voló hasta México que otra pasajera aguardaba. MARÍA EUGENIA HERNÁNDEZ SALAIS. Nacida en Ensenada, Baja California,  (México) reside en  MAZATLAN, SINALOA (MEXICO). Es Abogada con Maestrías en Derecho Penal, Administración y una especialidad en Literatura Mexicana del Siglo XX. Asistente a  congresos de lectura y poesía en: Puebla, Oaxaca, Hermosillo (México), La Habana (Cuba), Encuentros de poetas en Argentina: San Juan, Buenos Aires, Santa Maria de Punilla, y Brinkmann. Asimismo en Malasia y Perú. Publicaciones: en 2009 libro de poemas “Brumas y lejanías”  (Ed. De los cuatro vientos – Bs. As.); en 2010 libro de poemas “Fuegos fatuos” (Ed. De los cuatro vientos – Bs. As.); en 2011 libro de relatos “Sirenas amarillas” (Ed. De los cuatro vientos – Bs. As.); en 2014 breve antología bilingüe “Océanica” (Ed. De los cuatros vientos – Bs. As.).

E Mail:  mehs1217@prodigy.net.mx

 

 

RITUAL

 

El antiguo ritual del sacrificio,

violento mis pasos hasta el Abra.

Agudos sonidos multiformes

acallaron veloces mis lamentos.

De pronto lo sentí, inmóvil y expectante,

petrificada quedé, cortados voz y hálito de viento.

Hipnótico y concentrado brillo descubrí,

en el par de esmeraldas con que observa.

El intenso latir del corazón,

sofocó el grito y el desgarre.

El jaguar avanzó.

 

 

LA SOMBRA

 

Hoy me visito una sombra,

la sentí llegar, mustia, sinuosa,

agazapada, avanzó por los rincones,

se disfrazó de gárgola incolora.

Torpe fui yo, bajé mis alas,

clavo sus garras sin piedad en lo profundo.

Así, me transformé,

en fantasma de mi misma

 

 

LUZ Y SOMBRAS

 

Castigan tus sombras de gélido silencio,

la geografía solar de mi epidermis,

se rebela...

¡Yo pertenezco al sol, nací quimera!

 

 

BAJO LOS SAUCES

 

Escribir bajo los Sauces

es un acto infructuoso en que desnudas,

las almas despiden en el huerto,

fulgor de candelabros apagados.

 

 

NOCTURNO PRAGA

 

Callaron voces espesas, los pasos

leves, tiñeron piedras, velos y ausencias,

la ciudad en duermevela, hiló sueños,

sol impuro.

Descarnadas las pasiones,

torvos hijos de la noche, rondaron

las avenidas.

Vampiros descontrolados, solitarios, sin

hermanos.

 Al renacer otro día, fabricantes de

palabras, inundaron avenidas,

en una ciudad vestida y maquillada

en agonía.

Lejos quedaron los tiempos de una Praga

novia ingenua, ruborizada al ocaso,

florecida en primavera.

La devoraron los vientos, ferocidades

de hienas,

que después de la carroña

devoran almas en pena.

Ciudad grande, Nové mesto, te

persiguió en el vacío, plenilunio sin

estrellas.

Sus habitantes posaron, la mirada en lo

divino, hartos de tantas miserias escribieron…

poesía. 

Dejamos las tierras aztecas y, en tren de seguir viajando, el trencito enfiló para al Madre Patria. Pues podremos hacer un viaje con la imaginación y, en mi caso, el recuerdo, de una bella ciudad española: Granada. Nos deja su poema ÁNGEL MEDINA. Vive en MÁLAGA (ANDALUCÍA) ESPAÑA. Actualmente está jubilado como Funcionario del Estado. Le interesa la literatura en general y sobre todo aquello que te conduce a la reflexión. Por ello, sus autores preferidos son los que contribuyen a la formación del pensamiento, tales como Giovani Papini y Unamuno entre muchos otros. En lo que respecta a sus novelas tiene varias publicadas: “El retorno del Caudillo”. “Historias clónicas”. “El amante clonado”. “El cabreo nacional” y "Vaticano III". Actualmente da los últimos retoques a la corrección de una nueva titulada "Las máscaras de la vida". Suele escribir desde poesía hasta ensayos y relatos breves o cuentos.

E MAIL: angmedina_0001@yahoo.es

 

 

ALBAICÍN                                                                                               

 

Albaicín, remembranzas que dormitan

Jardines que se desnucan por tu tajo

Muros gastados del templo la limitan

Plazoleta donde el Tenorio musitó cabizbajo.

 

Recoleta, empedrada, mustia, belleza…sola

Árboles de hojas perennes o caducas

Fuente de mármol, blanco amapola

Pan mojado, salsa de caracol, manduca.

 

¡Ay, río áureo! ¡Ay, río áureo!

Mirador con tumulto de ola

Quejido de guitarra, desgarro

A los pies de una farola.

 

Si como tú, también pudiera ser

Sendero estrecho, alma sin mancha

Recordar quisiera tu atardecer

Que la rosaleda morisca ensancha.

 

Rincones donde se esconden romances

Viajeros que tus cursos remontaron

Y una vez atrás dejaron tu cauce

Sus cuitas ciegas arriban labraron.

 

Paseo de los Tristes que cantas; a tus pies

Alameda de vetustos caserones

Hilos de plata tejes mientras sonríes

Vergel que florece lleno de pasiones.

 

A un lado la bella Alhambra

Al otro lado, dédalo de callejuelas

Piedras sarracenas que siembran

Historias; vigilantes centinelas.

 

Río áureo, ¡ah, río áureo!

Cristalinas tus aguas bajan

Blancas como guijarros

Bajo hollados puentes viajan.

 

Suspiros que la palabra retarda

Lágrimas encierran el tarro

Y al abrirse el cielo las guarda,

¡Ay, río Darro! ¡Ay, río Darro!

 

La locomotora estaba cansadísima, demasiado ajetreo para ella. Era hora de regresar al pago. Y tranquito a tranquito llegamos a nuestro andén. Y aquí los espero con sus cuentos y poemas (más una minibiografía o actualización de la misma) en: letrasenelanden@gmail.com

Un abrazo y nos estaremos reencontrando

 

CRIS FERNÁNDEZ